Terminado otro partido, los hinchas de Racing no podemos parar de sufrir en éste interminable e insufrible campeonato. Cosechamos una nueva derrota, perdimos con quienes eran amigos nuestros hasta no hace mucho, Gimnasia nos derrotó en un discreto partido por 1-0 con gol de Álvaro Fernández.
Merlo tuvo que armar el equipo con lo que tenía a mano y hacer funcionar a un plantel que es un desastre, pero el DT, si bien no es mano, supuestamente está capacitado para elegir y dar la indicación correcta, para que el equipo haga lo debido y consiga el objetivo de la victoria. Pero esta versión de Mostaza, dista mucho de esa que vimos en el 2001.
Nelson Ibáñez por Saja, lesionado, Yonathan Cabral por Saveljich, también con dolencias y Luis Ibáñez por Matías Cahais, que debió abandonar la concentración porque su mujer sufrió complicaciones en su embarazo y Francisco Cerro por Bruno Zuculini, de muy flojo nivel, fueron los cambios que metió el DT, ninguno dio resultados.
El PT fue un bodrio, nada de nada por ningún lado. Ni Racing ni Gimnasia se lastimaban, una llegada del Lobo ante una salida desprolija de Ibáñez y un remate de Rodrigo De Paul, luego de una combinación magistrla entre Valentín Viola, Luciano Vietto y el 10, fueron las únicas llegadas a los arcos.
Para la segunda parte, Racing seguía apostando a los desbordes de De Paul, que hacía lo imposible, y muchas veces lo lograba, por llevar peligro al arco de Monetti, pero solo no se puede concretar mucho. Y Gimnasia se dio cuenta que por el lado de Ibáñez podía encontrar algo que lo acercara a su homónimo del arco.
Vietto fue el primero en abandonar la cancha por flojo rendimiento, en su lugar entró Gabriel Hauche, que no entró enchufado, como siempre. Más tarde Diego Villar le cedió el lugar a Juan Ignacio Dinenno que tampoco tuvo participación, aunque las corrió todas, pura voluntad.
A todo ésto, a los 21' un desborde de Maximiliano Meza por el lado de Luis Ibáñez, le sirve un centrazo al uruguayo Álvaro Fernández que sólo tiene que empujarla ante la muy mala salida del Ibáñez arquero, que permitió que el delantero cabeceara en el área chica.
Luego llegó la hecatombe, a los 34' Mostaza Merlo decidió que Luciano Aued entrara por Rodrigo De Paul, un descalabro del DT, Merlo decidió sacar de la cancha al mejor jugador, al único que llevó peligro al arco rival, si queriamos empatar, Mostaza la desestimó con el cambio.
Ahí Racing perdió el partido, más allá de que tuvo el gol luego de un tiro libre que fue rebotando en los defendores platenses hasta que Pablo Alvarado la tiró por arriba del travesaño.
Bueno, otra vez derrotados, una nueva humillación, el juego no parece, los resultados nunca llegaron, la tabla dice que somos el peor equipo de la temporada, y el DT todavía no se dio por enterado que los jugadores no les responde. ¡¿Hasta cuándo vamos a seguir perdiendo el tiempo?!. Por lo pronto se viene Argentinos el próximo domingo a las 17 horas.