La parada era dificil, había que visitar a Vélez en el Fortín, allí donde no ganabamos hace 12 años y con un Vélez que juega excelente y que con el triunfo se ponía como único líder. Pero no contaba con el taco de Luciano Aued y la gran definición de Luciano Vietto, para darle el triunfo a Racing por 1-0.
Mostaza volvió a jugarsela por el sistema que empleó en el partido ante Atlético Rafaela y que tan bien le fue. 5-3-2, con Gómez, Alvarado, Saveljich, Cahais y Luis Ibáñez. Fueron una muralla en el PT, los dirigidos por el Turu Flores nunca pudieron vulnerarla y Saja pasó una primera mitad muy tranquila.
De hecho, las dos más claras fueron para nosotros, una de Gabriel Hauche que tapó Silva en el primer palo y la otra, de Luis Ibáñez que luego de un toque de Valentín Viola, quedó solo ante el arquero, pero su remate fue enviado al córner por el mismo.
Así se fue el PT, sin emociones sobresalientes y con un Racing mejor parado que Vélez, que si bien manejaba la pelota a merced, nunca pudo penetrar la muralla presentada por Merlo. De hecho la única que tuvieron fue un remate muy alto de Papa ingresando por la espalda de Gómez.
Todo cambió en el ST, esa muralla empezó a desgranarse y Vélez con Mauro Zárate y Lucas Pratto se hicieron dueños del partido y llegaban con peligro, el ex delantero de Boca, le ganó la espalda a Ibáñez y su remate pegó en el palo.
Por suerte Saveljich, Alvarado, Cahais y sobre todo Saja, con terribles tapadas, mantenian el arco en 0 con buenas acutuaciones. Pero Vélez se venía muy peligrosamente, por eso Mostaza mandó a la cancha a Yanathan Cabral por el ex fútbol croata, allí se terminó la joda, Vélez seguía atacando, pero el trámite era más parecido al del PT.
Con el ingreso de Luciano Vietto por Hauche a los 20' Racing comenzó a ganar en juego, el pibe casi que se colocó de enganche y se fue juntando con Viola para hacer salir del asedio al equipo y lo lograban bastante seguido llevando peligro para el arco local.
En ese tramo Racing tuvo variaschances con Vietto rematando desde afuera, un casi cabezazo de Zuculini que Cubero mandó justo al córner y un centro atrás de Viola que Vietto le dio como vino y se fue lejos.
El partido se iba, Aued había ingresado muy bien en el partido, manejando la pelota y en una de las incursiones suyas al área velezana, a los 46', mete un tacazo increible para la llegada de Vietto que define magistralmente ante la salida de Silva. Gol y a otra cosa, fue triunfo y nada más.
Nos llevamos un triunfo de Liniers que hacía 12 años no obteniamos, ganamos de visitante después de mucho tiempo y salimos del último puesto. Hay que seguir sumando, porque la temporada que viene es la que preocupa.
El próximo rival será Olimpo en el Cilindro, se buscará otra victoria que le siga dando confianza a un equipo alicaido, pero que la victoria de ayer no tape el bósque, porque éstos jugadores están haciendo la campaña más horrible y humillante de la historia.
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