Era la hora de la verdad, iba a ser el primer acercamiento de las nuevas caras con el hincha, aquel que te baja o sube el pulgar y que no le importa si el partido es de verano o invierno, si es la final del mundo o un amistoso. Fue un pobre empate 0-0 en el que Racing hizo un poco mejor las cosas.
Empezó maniatado en el medio campo, con la buena labor de Battión, Monserrat y Fredes, que no le dejaban tocar la pelota a Villar y le llegaba sucia a Vietto y Sand. Hasta que a partir de los 15m se empezaron a acentar y Racing tomó las riendas gracias a la velocidad de Ricardo Centurión, la figura.
Tuvo un gran partido Vietto, que se agrega a la lista de reemplazantes de Viola. Fue el que tuvo la chance más clara al no poder definir un centro atrás de Sand, la pelotafue salvada en la línea por Morel Rodríguez.
En el segundo tiempo ninguno hizo las cosas mejor, pero con el peso ofensivo de Camoranesi, Villar, Centurión y Sand, la Academia contó con las mejores chances pero sin ser mano a mano.
Las nuevas caras de Racing anduvieron bien, tienen el crédito abierto: Corvalán es un marcador de punta que va mucho más de lo que vuelve. Ortíz arrancó mal y terminó haciendose amo y señor de la defensa. Villar, fue el que peor anduvo, pero por la falta de fútbol, aunque mostró garra, corazón y toques simples, Sand tuvo poco contácto con la pelota, pero se nota el respeto que impone. Campora no incidió el tiempo que estuvo al igual que Pérez Güedes y Camoranesi, fue el dueño de Racing a partir de su entrada, pateó córners, tiros libres de derecha y izquierda, habló con el árbitro, un jugador que se necesitaba.
Si bien no fue el mejor de los comienzos es mejor probar y equivocarse ahora y mejor de cara a Atlético Rafaela el próximo sábado a las 20.20 en el Cilindro. Los muchachos tienen el crédito abierto.
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