Luego de la derrota ante Argentinos del domingo pasado, se lo sindicó como el culpable de la derrota al tomar la equivocada decisión de patear el penal otorgado a Racing y errarlo.Que la pena máxima la debería haber ejecutado Bieler, Hauche, Lugüercio y la lista puede seguir y no Yacob, es muy cierto, pero al menos rescáto la hombría que tuvo para agarrar la pelota y patear, porque a los nombrados en la lista no se les vió las misma ganas para patearlo.
No comparto los insultos del final y los silbidos cada vez que tocaba el balón, no digo que no se enoje porque yo también lo hice, pero siempre dentro de los 90 minutos que dura el partido.
Claudio Yacob es pieza clave en el mediocampo, es el capitán, el hombre que le da fútbol al equipo cuándo todos los encargados de ese ítem, y suele ser muy seguido, se nublan y también tiene sangre.
En la semana dijo que patearía nuevamente si lo designa Russo, cosa que yo no estoy de acuerdo, por eso de que hay jugadores más capaces para patear un penal, como así también él y algún otro del plantel, está capacitado para llevar la cinta.
También estoy molesto con la gente de Racing, que es, fue y será la mejor hinchada del país, pero también muy cabeza dura y parece no tener memoria. Digo, por los insultos a La Flaca.
Esa misma gente que se descargó con Yacob es la misma que aplaude a Luegüercio cuándo se tira al piso y no cuándo hace alguna jugada interesante o la misma que putea a Roberto Ayala porque se deja llevar por lo que dicen los medios durante la semana sin hacer un análisis o la que entupidamente cree que De Olivera es un gran arquero y dista muchísimo de serlo.
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