Los barras de Racing me terminaron de convencer de que son unos cabeza huecas, inéptos y que no saben nada, peron NADA, de fútbol.Ayer se presentaron en el playon del estadio, donde el quipo se entrenó y fueron a buscar a Braian Lluy, a quien le rayaron el auto y lo amenazaron, porque según ellos, el lateral de Racing, había salido a un boliche luego de la derrota ante Independiente.
Mamita, que idiotas que son, porque ni siquiera hacen una inteligencia previa. Lluy, que es más bueno que Lassie atada, salió sí, pero al cumpleaños de un miembro del plantel, y para colmo fue el primero en retirarse, ya que tiene una hijita recién nacida.
Decirles bobos, es denigrar a los bobos. Que se puede esperar de tipos que nunca miran el partido y además aplauden a tipos que viven en el piso, como si fueran topos, y a otros que hacen un gol cada 5 partidos.
Lluy, desde este blog, Ricardo Alberto Maríngolo, el TANO, te banca (aunque jugaste mal el clásico), yo me la banco contra estos giles.
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