Que grande!!!, que ídolo, que jugador, por favor!!!!, sí, hoy es el cumpleaños Nº55 del hombre nacido en Artigas, Uruguay, pero que nosotros, los academicos lo adoptamos y él se dejó adoptar para entrar en nuestra historia para siempre.
Fue bautizado como Rubén Walter Paz Márquez, y llegó a nuestras vidas en 1987, proveniente de otro Racing, el Matra de París. Pero el de Avellaneda es su casa para siempre.
El uruguayo, dueño de una pegada increíble, nunca necesitó pegarle con bravura a la pelota, siempre la acarició como si fuera su novia, siempre la trató bien y ella se portó siempre bien con él.
Tuvo dos ciclos más que exitosos en Racing en cuanto al juego, porque obtuvo solo dos titulos, la Supercopa de 1988 y la Interamericana de ese mismo año. Realmente el uruguayo merecía más laureles.
Muchas veces se lo nombró como entrenador de la gloriosa academia, pero nunca se llegó a cristalizar.
Los hinchas de Racing estamos muy orgullosos de nuestro jugador emblema de la década del 90, un jugadorazo y un tipo de diez.
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