Había que recuperarse del duro golpe que significó la derrota por 4-0 ante Tigre y Racing lo logró, quizás no fue un partido con todas las luces, pero el triunfo enel final ante Arsenal por 1-0, le da una nueva energía para enfrentar el domingo a Independiente.
Tres cambios metió Diego Cocca para enfrentarse al conjunto de Martín Palermo: Yonathan Cabral en lugar de Nico Sánchez, de mal partido ante Tigre, Ricardo Centurión en lugar del lesionado Marcos Acuña y la sorpresa de Wason Renteria (7 meses sin jugar) por Facundo Castillón que padece una fascitis plantar.
Fue un partido muy aburrido con escasas jugadas de gol, de hecho en el PT Arsenal tuvo el gol en los pies de Sebastián Palacios, que Sebastián Saja logro atorar y tapar de manera brillante para evitar el gol de Arsenal. Y Racing tuvo una meda vuelta de Diego Milito que resolvió bien Esteban Andrada y un mano a mano de Renteria que fue atorado al momento de disparar.
Nada, la primera mitad del encuentro no tuvo nada rescatable, solo el frío se hizo presente en la tarde de Avellaneda, no hubo ideas, no hubo juego.
El segundo tiempo arrancó igual, pero Centurión comenzó a hacerse cargo del juego y eso se notó en un Racing algo más ofensivo, con un Milito más enchufado, pero sin llegadas claras y sin tneer volumen de juego.
Por el lado de Arsenal, una nueva salvada de Saja ante Palacios que remató fuerte y bajo, pero el arquero en una repentización increible, pudo evitar el gol.
Renteria tuvo que dejar la cancha producto de su larga inactividad, estuvo flojo pero con movimientos que ilusonan, por él ingresó Gonzálo Bou, que si bien no anduvo bien tocó bien tres pelotas y creo peligro. También ingresó Diego Villar por Centurión y Luciano Aued en lugar de Nelson Acevedo, ahí, con éstos dos ingresos Racing ganó en fútbol.
Pero el partido se iba lenta y paulatinamente hacia un final triste y con muchas dudas, hasta que a los 39' Bou desborda por izquierda y manda un centro que pega en la man de Jorge Curbelo y Diego Ceballos cobra penal. Jugada polémica, porque la pelota parece no pegar en la mano del defensor, pero el jugador abrió ampulosamente las mans confundiendo a todos.
A los 41' Diego Milito tomó la pelota, la acodó en el punto penal, miró al arquero Andrada y cuándo Ceballos pitó, corrió hacia el balón y con una serenidad enorme, la clavó a media altura al palo izquierdo del arquero.
Racing logró superar el mal partido del viernes y ganó, con justeza, pero ganó y eso es lo que importa, se viene Independiente el domingo, duelo de dos equipos que juegan parecido, ojalá los muchachos de Cocca nos regalen una alegría.
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