Hasta que recibí el mensaje con la triste noticia, tenía la esperanza de que abrieras tus ojos y pudieras seguir con tu camino en la vida. Pero Dios ha decidido llevarte junto a él para que formes las huestes de ángeles que tiene en el cielo.
A los 55 años, producto de un paro cardiorespiratorio, derivado de su deteriorado estado de salud. Los médicos de la clínica ALCLA, no pudieron reanimarlo y el director de la clínica Dr. Gustavo Barbalace fue el encargado de dar la noticia.
Su madre Lilian Clarck era el bastión anímico que tenía Gustavo y toda su familia, ahora podrá descansar en paz él y Lilian descansar después de 4 años muy duros en los que se la notó entera siempre y con esa ilusión a flor de piel.
¡¡¡ADIOS GUSTAVO!!!
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